Por mas que en muchas ocasiones comemos al apuro en un patio de comidas, comer siempre es un ritual ya sea que estes solo o acompañado. Y ese ritual de 10 min o de dos horas debe ser un momento de querernos un poco más porque estamos nutriendo nuestro cuerpo. Es por esto que valoro tanto la iniciativa que ha tenido Mall El Jardín; comer debe ser una acción que marca una diferencia, no solo en nuestro entorno si no también en nuestra mente y en nuestro cuerpo. Para muchos, estas acciones pueden parecer que tienen solo un impacto en el medio ambiente, pero aunque no lo crean existe un impacto en nuestra psiquis también.

LLes explico. Los ritos son parte de nuestras costumbres sociales, y a la hora de comer en casa ponemos la mesa. Es decir, ubicamos cubiertos en cada puesto, ponemos una servilleta, un vaso para tomar algo y si hay tiempo tal vez un elemento decorativo. Lo hacemos como algo rutinario, sin darnos cuenta que estamos preparando un espacio para nosotros y para otros, una suerte de homenaje a quien se sienta a recibir un alimento. En cambio cuando comemos al apuro en vajilla desechable, la experiencia se vuelve desechable, sin trascendencia alguna porque todo termina en la basura y tristemente el alimento muchas veces también. Cuando nos sentamos en una mesa con una vajilla que identificamos , reconocemos el alimento y el momento de comer. Es justamente eso, lo que ahora también vas experimentar en el momento en que te sientes a comer en el Patio de Comidas de Mall El Jardín. Te invito a que vayas y nos cuentes que tal te pareció ser parte activa de un cambio positivo para ti y para el medio ambiente.